Intensivo Abril 2009 en Cruz Chica

Del 3 al 5 de Abril estuvimos en el peñasco creando y recreando-nos a partir de nuestas propias historias. Gente linda de Córdoba, Villa Allende, Rio Tercero, Rosario, España y un viajero de latinoamérica.
Gente con mucha experiencia en teatro espontáneo con algunos que se asomaban por primera vez, el grupo creció día a dia en confianza y potencia creativa.
Ejercicios de improvisación, juegos, action theater, trabajos de textos, sintesis poética, poemas japoneses, nuevas estructuras de representación, fueron generando un grupo que narraba , contenía y recreaba creativamente en escenas las historias, sueños, y sensaciones que se iban despertando en esta convivencia de fin de semana.
Improvisando en conexión unos con otras, sobre los relatos acerca de de nuestras vidas, relatándonos con libertad, contándonos lo que nos pasa como nosotros queremos hacerlo y abriéndonos a aceptar lo que los demás hacen con nuestro relato, nuestra mirada se fue expandiendo ante las escenas recreadas en la versión improvisada de los demás sobre nuestra propia historia.
Nos alojamos todos en la misma casa, cocinando nuestras propias comidas organizadas a la maravilla por Gabriela, exquisita cocinera, psicóloga de bsas, recien llegada a Cordoba y estudiante avanzada de chef !!
Una troupe de ayudantes aprendió a amasar tallarines caseros, hacer salsa, amasar de pizza que cocinó a la parrilla nuestro viajero trashumante la ultima noche en el peñasco.
Rostros, gestos mínimos, detalles, climas, expresiones captadas por la cámara fotográfica atenta . Fotografiar es capturar esos momentos únicos e irrepetibles.
Entre sesiones de entrenamiento, bailes, paseos, descansos, preparacion de comidas y largas sobremesas durante el dia y trasnochadas en la galeria o bajo el cielo estrellado después de cenar, el fin de semana fue un remanso para nuestras almas y un recreo para nuestros cuerpos en medio de este agitado y preocupante comienzo de año 2009.
Poco a poco fuimos regresando el domingo a nuestras orillas,
la casa se fue vaciando, y en el silencio y la quietud, quedaron flotando las historias, los rostros, las miradas, los cuerpos improvisando, las risas , las charlas de los que alli estuvimos conviviendo este fin de semana otoñal.